De mas desto añadieron en la Musica los bailes y danças, acompañandolos (que es lo peor) con muchas cosas demasiadas, y con vnos mouimientos menos que honestos; cantando palabras y materias indignas de vn animo virtuoso y noble, como vemos en estos nuestros infelices y desdichados tiempos. Adonde assi como la Musica primeramente era honesta, varonil y prouechosa: assi començo después degenerar de la primera forma que retenia, y perder su primera y severa gravedad; haziendose affeminada, lasciua, poco honesta. y muy dañosa à los amimos castos y virtuosos.