[…] sacó [Sylvano] una çampona que en el çurrón traya y la començó a tocar tan dulcemente que el valle, el monte, el río, las aves enamoradas y aun las fieras de aquel bosque quedaron suspensas y dexando la çampoña al son que en ella avía tañido, començó esta canción : Canción /Ojos que ya no veys quien os mirava […]
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