[…] algunos maestros de organo an compuesto algunos medios registros doblados, esto es; de dos tiples, y de dos baxones, para monjas, los quales por facilitarlos, los an hecho a quatro vozes: pero en realidad de verdad bien se echa de ver, los inconuinientes y imperfecciones que tienen, que no son peq[ue]ños. […] assi aconsejo q[ue] sean cinco voces los que compusieren. Estos mismos inconvenientes tienen los medios registros de dos baxones, y otro mas, y es que siendo a quatro vozes, y por consiguiente dos tiples, o tiple y alto, las superiores suenan y se oyen tan poco con el ruydo de los dos baxones, que no se distinguen ni pueden entenderse: y assi se guarde lo mismo, esto es; que sean a cinco vozes; porque en efecto canta[n]do tres tiples contra dos baxones, ya que no suenan tanto; sonaran poco menos.